¿HABLAMOS DE FUTBOL…?

Hoy quería hablar de futbol, simplemente de futbol y a fe de que lo haré pero les aseguro que no en el sentido en el que hubiese deseado hacerlo. No, hoy les voy a hablar del otro futbol, de aquel que no se ve pero se siente.

En primer lugar quiero reflexionar sobre un hecho que me ha llamado poderosamente la atención.

Desde mi infancia he tenido que soportar por activa y por pasiva que el equipo de España, el club de España, el que nos representaba a todos era el equipo blanco, el de las grandes gestas y ya más para aquí el del espíritu de Juanito.

Pues bien, ese tremendo equipo, el representativo de toda una nación según nos manifiestan casi continuamente desde el foro todos sus altavoces, todos sus talibanes mediáticos, saltó el otro día al nuevo Ali Sami Yen con un solo español entre sus titulares. ¡Pero señores! es el representativo y todos cuantos juegan en él son mucho más españoles que aquellos que lo hacen en el Athletic o el Barça por poner tan solo dos ejemplos.

Y eso que les comento se nota sobre todo en las retransmisiones, en como lo viven, en como lo narran, en como lo sienten y sobre todo en el tratamiento que dispensan a unos y otro.

Ayer en el terrible partido que jugó el Barça frente al PSG no hacía falta que el árbitro señalase una determinada infracción o no, ya estaban los comentaristas para encargarse de ello. ¡Esa jugada es fuera de juego de Pedro! ¡Eso es falta de Piqué! ¡Por dios que mal esta Busquets! ¡El PSG se los está comiendo! ¡El Barça no está jugando a nada!

Ni un solo vamos, ni un comentario de apoyo, parecía como si les alegrase que el Barça las estuviese pasando canutas, que diferencia con otra retransmisión que se produjo veinticuatro horas antes.

En fin y luego la gente se pregunta qué coño le pasa a los catalanes. Reflexionen y extrapolen, porque en todo es igual; solo falta de que nos acusen que tuvimos la culpa de crucificasen a Jesús; y verán lo que nos pasa.

Pero cambiemos de tercio que luego de estas aguas nos metemos en aquellos lodos.

En España nos quejamos de nuestros arbitrajes domésticos pero les aseguro que por Europa la cosa me parece que esta mucho peor.

Al Málaga lo han echado de la Champions “by the face” (por la cara) y ese arbitro (apuesten señores) seguro que dirigirá una de las semifinales, sino la final que se disputará en dura pugna con el inefable Stark o quizás Moen… quién sabe porque todavía quedan partidos y puede aparecer un nuevo pretendiente aunque yo creo que de esa terna o algún portugués oculto ande la cosa.

En fin, ya tenemos nuestras semifinales a la carta. Solo falta saber si los rectores del futbol europeo decidirán un, alemanes contra españoles por aquello de una final con morbo o cruzarán a los unos con los unos y a los otros con los otros para tener así una final más cosmopolita y menos racial.

Sea lo que fuere creo sinceramente que han llegado los cuatro mejores aunque no esté el Manchester y que el merchandising de estas semis y de la final batirá todos los registros históricos.

La lástima es que el futbol es otra cosa y los que gozamos con este maravilloso deporte cada vez lo hacemos menos… ¿saben por qué será?

SERGEI