COMO DECÍAMOS AYER:

13.03.2013 08:26

 

Parafraseando a Fray Luis de León, ayer ya mostré mi absoluto convencimiento de que este elenco de grandísimos jugadores sería capaz no solo de remontar sino de ofrecernos una nueva lección de futbol magistral y artístico.

La lógica, que en muchas ocasiones obviamos reemplazándola por el fanatismo o la ensoñación, invitaba a pensar en ello.

En primer lugar porque cuando se alcanza tal nivel de excelencia, es imposible que este desaparezca de la noche a la mañana si los mimbres del cesto son los mismos. Simplemente se trataba de reparar las cañas que por uso se habían deshilvanado.

En segundo lugar porque en un equipo que además de convertir en arte su profesión hace gala de una tremenda comunión, respeto y sinergia entre sus componentes es casi imposible encontrar fisuras que lo agrieten.

El Barça, retornó ayer a la esencia del futbol, de su futbol, esa que por mucho que otros lo intenten tan solo está al alcance de unos elegidos.

Fue Xavi, ¡oh Xavi!, el director de orquesta, el que impartió de nuevo un magisterio de cómo ver el futbol, de regates y pases imposibles, de unos cambios de ritmo inesperados, de una visión del juego que se avanza en segundos a quienes le rodean y acompañan. Si él está bien este Barça funciona con precisión suiza.

Fue Iniesta que cada vez que juega me recuerda un ballet, por su sutilidad, por su plasticidad por la simple belleza de su juego.

Fue Pedro, un jabato en la brega y la presión.

Fue Messi, como no, el de los pies ligeros, el que hace sencillo lo imposible, al que nadie le para, el que se va de todos.

Pero sobre todo fue el Barça, el que volvió a su origen, de la presión arriba y asfixiante, de defensa plantada en tres cuartos de campo, medio campo achicando al contrario, de juego a uno dos toques, de precisión letal, el Barça que nunca se marchó pero que al parecer tomó un breve respiro, nada más.

Como dijo Guardiola hace ya un lustro, abróchense los cinturones porque estoy convencido de que este equipo, de aquí a final de temporada nos hará disfrutar como nunca o mejor… como siempre. 

 

SERGEI.