JAMÁS HABÍA DISFRUTADO TANTO:

30.04.2013 10:39

 

JAMÁS HABÍA DISFRUTADO TANTO:

 

Nadie puede discutir la dificultad que entrañan estos dos partidos de vuelta de las semis.

Primero porque la superioridad y contundencia de los teutones en sus campos fue apabullante y segundo porque los resultados también lo fueron.

A mí personalmente me divierte comprobar cómo el madridismo más recalcitrante intenta inculcar en sus nuevas generaciones los valores tradicionales del mejor club de la historia, apelando a la testiculina, a espíritus protectores y adalides y a una historia plagada de episodios coincidentes, pero no, tal y como desde allí se asegura,  en mayor medida que otros grandes clubs del futbol continental.

¡Ojo! Y yo soy de los convencidos de que toda esa parafernalia, tuvo su momento, su época, era una afición que rara vez veía perder a los suyos y aún más esporádicamente que no se entregaran al cien por cien.

Fueron épocas de leyenda, como el otrora universal imperio de España.

Pero la realidad es que nos encontramos ante un equipo que lleva más de una década sin degustar las mieles de los excelsos éxitos, fracasando precipitadamente y provocando unos sofocones entre los suyos, tremendos.

Un equipo que probablemente y por enésima vez llega al cenit de su progresión o incluso ya lo ha ultrapasado y se encuentra ante un partido en el que van a tener que jugar a futbol y el todo por el todo.

Y ahí es precisamente donde veo muy difícil que el Real Madrid remonte esta noche, porque dudo que se pueda imponer en la batalla del centro del campo.

Y no lo digo por la condición física, sino porque en esa zona del campo, esta noche se van a ir incorporando elementos desarrollándose casi todo el juego  entre un cuarto y medio campo.

Salvo sorpresa inicial, con un rápido gol en los primeros minutos, el juego será muy táctico con constantes basculaciones e incluso permutas en las posiciones pero ahí, enfrente, el Real Madrid no solo encontrará disciplina y fuerza. También mucha calidad.

Por lo tanto yo creo que el partido dependerá muy mucho de quién marque el primer gol y en qué momento.

Si es el Real, se desatarán los vientos y camparán por las gradas del estadio los espíritus de todos los colegas que siguen siendo socios. No digamos si cayese un segundo a poco del final de la primera parte. La segunda parte sería excitante. Un autentico infierno merengue.

Pero y si… opción por cierto nada desdeñable, es el Borussia el que en rapidísimo contragolpe perfora la puerta de SuperLópez. Ahí tan solo quedará la heroica, por otra parte un suicidio contra esta gente, o jugar de maravilla. A un toque, con paredes constantes y permutas continúas en la posición a velocidad endemoniada, presión asfixiante ante cualquier pérdida o balón dividido y alta definición tanto en el último pase como en la resolución del mismo. Y todo esto con constancia, creando ocasiones y apabullando al rival.

Y que quieren que les diga, ya lo hice al principio, está más que difícil pero…

Hoy por hoy, tan solo hay un equipo capaz de desarrollar un juego así y ese juega mañana.

El Bayern es tan temible o probablemente aún más que su compañero de cita teutón.

Y el Barça llega indudablemente fundido y plagado de lesiones en posiciones clave.

Sin embargo y a diferencia de las nuevas generaciones del Madrid, las del Barça son hijos y nietos que han visto a su club encaramarse a lo más alto del concierto internacional en muchas ocasiones y además no solo en futbol o básquet.

Una generación orgullosa y ganadora como corresponde a la que ha nacido y ha crecido con el mejor club del mundo.  

Y la gran mayoría de los que hemos vivido la más clara de la época gris, creo que también estamos a muerte porque jamás habíamos experimentado un orgasmo similar, jamás habíamos disfrutado tanto.

Y mientras otros se agarran a lo que ya saben, aquí aún confiamos en que a pesar de todo Busquets, Xavi, Iniesta, Pedro o Messi, estén a su máximo nivel o sean capaces de llegar a él y nos regalen una de esas noches que me hagan exclamar después del coito ¡jamás había disfrutado tanto!   

 SERGEI.