PERO… ¿A QUE ESTAMOS JUGANDO?:

En esta vida el objetivo prioritario de todo ser humano, individual y colectivamente debe ser evolucionar y a tenor de lo que se observa y escucha a diario en mi opinión estamos en plena etapa recesiva.

Los sueldos son inferiores a los que la mayoría cobrábamos hace veinte años, las condiciones laborales… bueno eso ya no existe, te echan sin siquiera pagarte la liquidación, la política… para que vamos a hablar.

Y para acabar de aderezarlo todo, los culers que ya tenemos una cierta edad empezamos a recordar con inquietud tiempos pretéritos.

Yo me pregunto si determinados barcelonistas que se llenan la boca con su amor hacia nuestros colores lo son realmente o por el contrario utilizan la Institución para engordar sus egos a través del cisma que con sus actitudes producen.

Desde pequeñito mis padres me inculcaron que cuando se tiene un problema con alguien, se debe solucionar con ese alguien, cara a cara y a ser posible sin que trascienda.

Me resulta inconcebible que un club, probablemente el más grande del mundo a nivel deportivo y que mayor numero de éxitos ha conseguido en los últimos tiempos (y ojo no me circunscribo solo al futbol) se convulsione un día sí y otro también por cuestiones ajenas a su razón de ser, es decir, a su excelencia deportiva.

Qué coño nos importa (con perdón de la expresión) a todos los culers que Pep, por quién siento no solo admiración sino también un profundo respeto, este dolido porque se ha utilizado la enfermedad de un amigo (a quién por cierto no fue a visitar cuando este le necesito) para atacarle.

Lo que ha conseguido Pep es que ahora todos ataquen al Barça gracias a su incontinencia.

Si el fichaje de Neymar lo hubiese consumado otro club aunque hubiese sido por un valor mucho más elevado, a día de hoy nos hubiesen dado documentales del chaval hasta en la sopa y no digamos ya los parabienes que hubiese recibido la institución de marras por cerrar tal obra de ingeniería financiera.

Aquí, grandes gurús del barcelonismo no sé bien guiados por qué oscuros intereses o rara enfermedad, incluso cuestionan lo acertado del mismo.

¿Alguién puede dudar de un eqiuipo que tantos exitos nos ha dado y que además se ha reforzado con quién posiblemente sea el mejor jugador mundial en un futuro?

Por dios… ¿pero estamos locos o qué?  ¿A que estamos jugando?

Resulta que un club jalonado de éxitos durante la última década, con un modelo propio, enviado y copiado por cierto por otros grandes clubs, se fagotiza en guerras intestinas que debilitan y dañan una imagen que debería ser impoluta.

Desde estas líneas me gustaría hacer un llamamiento a todos los culers pidiéndoles que se dejen ya de chorradas y choques de egos y se pongan a remar todos juntos para que el nivel alcanzado hasta el momento no solo no mengüe sino que a ser posible aumente.

Y para ello la única via a seguir es la unidad, sentirse orgulloso de lo que hay y esperanzado en lo que viene.

Ya estoy deseando que empiece la temporada porque lo más probable es que tras el segundo partido se nos vuelva a caer la baba aunque en caso contrario mucho me temo que los daños resultarán devastadores para el club. 

Esperemos que no sea así y dispongamonos a disfrutar de nuevo del mejor equipo del mundo. 

SERGEI.