QUE MEJOR ALIADO QUE EL LÍDER DE TU ADVERSARIO (II):

Igual que resulta indudable que el dinero no da la felicidad pero ayuda muchísimo a conseguirla, es igualmente innegable que en el mundo del futbol el dinero no te garantiza los éxitos por mucho que te permita disponer de los medios que te acerquen a ellos.

En un mundo tan material como este, muchas veces obviamos que existen unos componentes intangibles que no se pueden comprar.  

El señor Pérez, catalogado como ser superior en su momento, es una buena muestra de ello.

Posee poder y sabe ejercerlo; tan solo hemos de echar un vistazo al palco de Chamartín para comprobar que ese glamur que albergaban los circos romanos alrededor de su emperador, donde se repartían tierras y legiones, se manifiesta en él;  sin embargo el éxito deportivo de la institución cada vez se aleja más.

Hasta no hace mucho era indiscutible su primacía aunque tan solo fuese a nivel de fichajes, lo que se proponía acababa siendo suyo.

Sin embargo incluso eso ha variado y como muestra el tremendo revés que le ha supuesto el tema Neymar, las durísimas complicaciones que le está acarreando el fichaje de un nuevo técnico por el que finalmente acabará pagando el gusto y las ganas, la negativa de su segundo plato para hacerse cargo de las riendas de tan histórico club, el deseo de algunos integrantes de la primera plantilla por abandonar la nave o las estratosféricas cifras que se mueven en torno a los posibles refuerzos.

Y yo me imagino que muchos, sobre todo seguidores de ese club, se estarán preguntando ¿pero qué está pasando?

Y otros, desde la distancia, tenemos el convencimiento de que lo que le sucede al Real Madrid es simplemente la lógica consecuencia de un estilo, de una manera de proceder y de hacer.

Se puede poseer el poder y los recursos necesarios como para obtener recalificaciones, tratos de favor o las más rutilantes estrellas del universo pero… ¿y el corazón, los sentimientos o esos valores de los que tanto se habla?

Se pueden juntar en un mismo vestuario a una constelación de estrellas mundiales pero no hablan el mismo idioma,  carecen de un pasado conjunto, de una ilusión común albergada desde su tierna infancia y sobre todo del amor y el orgullo de defender unos colores por los que empezaron a luchar desde pequeños.

Se puede intentar torpedear un fichaje ofreciendo más del doble que tu rival pero si quién debe ser fichado valora más su felicidad y crecimiento, hacia donde desea dirigirse que aquellos cantos de sirena que le prometen convertirlo en el hombre más famoso y más rico uno se encuentra en que no tiene ningún otro argumento para poder convencerlo porque ese intangible que no puede comprarse con dinero allí no existe. 

Se pueden convocar unas elecciones en las que la investidura resulte ser una imposición porque se han hecho a la medida de un solo candidato. 

Se puede ser o no ser y yo siceramente deseo que el señor Peréz lo siga siendo. 

SERGEI.